Ahora sí, ya huele a fin de curso… El pasado viernes 29 de junio tuvo lugar la ceremonia de Graduación de los Grados Superiores de Administración y Finanzas, Asistencia a la Dirección y Marketing y Publicidad.
Así despedimos a un grupo que como los delegados de curso, Nerea Idoate e Iker Esparza, apuntaron en su discurso: “nos une la voluntad de hacer las cosas mejor, y para eso hay que hacer las cosas de forma diferente, y nosotros somos los agentes del cambio, porque estamos preparados, porque podemos, y lo más importante, porque creemos que la voluntad radica en el éxito”.
En el transcurso del acto, la XXIII Promoción de Grado en Marketing y Finanzas eligió como madrina a la profesora de Comercio Internacional, Cristina Lacave, mientras que la XXIV Promoción del Grado en Asistencia Internacional a la Dirección en Marketing, hizo lo propio con el profesor de Business English, Alberto Campo.
El acto estuvo presidido por el director de Foro Europeo, Pedro Baile, y contó con la presencia también de Esther Monterrubio, directora del servicio de Formación Profesional del Gobierno de Navarra y de Marino Barasoain, director-gerente de Fundación Navarra para la Excelencia.
Este último, poco amigo de los sermones ortodoxos, les propuso un juego a los alumnos graduados, solicitándoles que cerraran los ojos y que señalaran dónde creían ellos que quedaba el norte. Tras una amalgama de brazos y dedos apuntando en todas las direcciones, Barasoain interpretó lo ocurrido y les transmitió que, a pesar de la formación y de lo aprendido en estos años, la realidad es que están “desnortados” y que por eso, ahora su objetivo es encontrar “el norte”, aquello en lo que destaquen y les haga felices.
Por su parte, la directora de los Grados, Mª Luisa Ordóñez, aprovechó para hacer balance del paso de los alumnos por Foro Europeo, quienes no siempre se pusieron fácil pero que ahora se ha convertido en orgullo, “no sólo por los resultados académicos sino porque el cambio que habéis experimentado es directamente proporcional al esfuerzo realizado”, les dijo.
Finalmente, Esther Monterrubio fue la encargada de clausurar el acto con unas palabras en las que subrayó la vocación europeísta e internacional de la Escuela de Negocios, cuya trayectoria ha podido seguir de cerca, debido a su vínculo personal y profesional con la educación.
Hubo risas, anécdotas, vídeos para el recuerdo, birretes al aire… y muchos buenos deseos para que la etapa que a partir de ahora se les plantea la asuman con ganas y actitud. ¡Puede que algo desnortados pero profesionales con creces! ¡Enhorabuena! Ahora toca comerse el mundo…